Derecho

22 de abril de 2024

TAYLOR´S VERSION?

Por: Laura Valentina Rodríguez Alba*

En los últimos años, la industria musical ha sido testigo de varios conflictos y disputas legales que han captado la atención de los medios y de los fanáticos en todo el mundo. Uno de los casos más destacados es el enfrentamiento entre la reconocida cantante Taylor Swift y su antigua compañía discográfica, Big Machine Records.

Para comprender plenamente la situación entre Taylor Swift y Big Machine Records, es esencial remontarse en el tiempo. Durante más de una década, Swift ha dedicado su esfuerzo a construir una exitosa carrera musical, obteniendo reconocimiento a nivel mundial y firmando con Big Machine Records, una compañía discográfica independiente que le proporcionó una plataforma para lanzar su música.

Sin embargo, en el año 2019, cambió todo cuando se anunció públicamente que Big Machine Records había sido adquirida por Scooter Braun, un destacado empresario de la industria musical.

Taylor Swift expresó su intención de explorar oportunidades y suscribir un contrato con otra entidad discográfica. Sin embargo, el equipo representante de Scooter Braun le informó que al suscribir el contrato con la disquera Big Machine, ella había transferido los derechos de autoría de sus composiciones a dicha discográfica, reteniendo únicamente la titularidad sobre las letras, pero no sobre las grabaciones. En consecuencia, se le prohibió interpretar en sus presentaciones en vivo las canciones producidas durante su asociación con esa discográfica.

En noviembre de 2019[1] fue anunciado que sería la artista de la década en los American Music Awards por lo que tenía pensado cantar algunos de sus mejores éxitos, no obstante Scooter Braun y George Scott mencionaron que no se le permitía cantar sus canciones en vivo en televisión porque ellos tenían los derechos sobre la música que había sido grabada y porque afirmaban que eso sería volver a grabar su música.

La venta de los derechos de la música de Taylor Swift desencadenó una disputa legal entre su equipo y Scooter Braun. La artista se sintió descontenta y frustrada al enterarse de lo que mencionaba ese contrato sin que ella previamente hubiera podido refutarlo. En 2020[2], Taylor compartió su malestar con sus seguidores a través de un tweet, revelando que Scooter le había informado por correo electrónico que había adquirido el 100% de sus canciones, videos y álbumes, a pesar de que ella nunca había autorizado tal venta inicialmente. Esta adquisición significaba que Braun ahora poseía los derechos de los primeros seis álbumes de Swift, incluyendo varios de sus mayores éxitos.

De acuerdo con Taylor Swift, la venta de los derechos de su música ha tenido un impacto significativo en varios de sus proyectos, incluyendo su presentación en los American Music Awards y un documental en desarrollo por Netflix sobre su vida. Además de estas preocupaciones, Swift también acusó a los actuales propietarios de Big Machine de amenazarla. Según un texto compartido en su cuenta de Twitter, Scott Borchetta[3], el propietario de Big Machine, le ha impuesto condiciones para permitirle el uso de su propia música.

En vista de lo mencionado anteriormente, Taylor buscó el asesoramiento de varios abogados para abordar su situación. Durante estas consultas legales, uno de los abogados señaló que existía la posibilidad de que Taylor pudiera regrabar sus álbumes ella misma. Esta sugerencia se basaba en un vacío existente en su contrato con la disquera en cuanto a la creación de nuevas versiones de su música. Con esta información en mente, Taylor tomó la decisión de aprovechar esta oportunidad y anunció públicamente su intención de regrabar y relanzar todos sus álbumes anteriores a 2018.

Al emprender esta acción, Taylor ejerció su derecho legal para recuperar el control de su propia música y ofrecer a sus seguidores una nueva visión de sus composiciones pasadas. Esta audaz iniciativa no solo le permitió redefinir su relación artística con su pasado, sino también establecer un importante precedente en la industria musical. Al regrabar y relanzar sus álbumes anteriores a 2018, Taylor no solo recuperó el dominio sobre su obra, sino que también pudo presentar una versión renovada de sus canciones, estableciendo así un nuevo vínculo artístico con su legado. Esta acción demostró que los artistas tienen la capacidad de proteger su creatividad y mantener el control sobre su trabajo. Además, le permitió a Taylor mantener su conexión con sus seguidores y preservar su relevancia en la industria musical. Actualmente, Taylor ha lanzado cuatro de los seis álbumes que grabó con Big Machine Records, todos identificados con la marca “Taylor’s Version” al final de cada canción, lo que marca una diferencia distintiva en su trayectoria discográfica.

En relación con el presente caso, es crucial examinar varios aspectos, tales como: ¿puede un productor de fonogramas (discográfica) ser titular de los derechos sobre la música grabada al punto de impedir que el artista vuelva a interpretar esas canciones?, ¿es legal volver a grabar las canciones y competir con la discográfica que las produjo?

Respecto al primer punto, una discográfica sí puede ostentar la titularidad de los derechos sobre la música grabada al punto de impedir que el artista vuelva a interpretar esas canciones, en ciertas circunstancias y dependiendo de los términos del contrato firmado entre el artista y el productor de fonogramas. En muchos contratos discográficos, el productor adquiere los derechos exclusivos de distribución y reproducción de las grabaciones realizadas por el artista durante un período de tiempo específico. Esto puede incluir el derecho de la disquera a controlar cómo y dónde se utiliza la música grabada, lo que puede afectar la capacidad del artista para interpretar esas canciones en vivo o grabar nuevas versiones de las mismas sin el consentimiento de la compañía discográfica.

Sin embargo, es importante señalar que los términos específicos del contrato pueden variar ampliamente y pueden incluir disposiciones que permitan al artista ciertas libertades con respecto a la interpretación de su música en vivo. En algunos casos, los contratos pueden incluir cláusulas de derecho de interpretación[4], que permiten al artista realizar sus canciones en vivo sin restricciones, incluso si la discográfica es la titular de los derechos de grabación.

Al comparar el caso de Taylor Swift con la realidad colombiana, se destaca la importancia de la transparencia en los contratos entre artistas y discográficas. Si bien es común que las discográficas incluyan cláusulas que otorgan derechos sobre la interpretación de las obras producidas, es fundamental que estas condiciones se establezcan de manera clara y comprensible para ambas partes involucradas.

En el caso de Taylor Swift, su experiencia demuestra los riesgos de firmar contratos sin entender completamente las implicaciones legales. Al ceder inadvertidamente los derechos sobre sus obras, se vio obligada a regrabar todos sus álbumes. Esto subraya la necesidad de clarificar qué derechos están siendo cedidos y cuáles son los límites de estas concesiones. Es esencial que los artistas comprendan plenamente los términos del contrato antes de comprometerse, asegurándose así de proteger sus intereses y su propiedad intelectual. En el contexto colombiano, este tipo de transparencia y claridad contractual es fundamental para evitar malentendidos y conflictos legales en el futuro.

Por otra parte, ¿se considera legal volver a grabar las canciones? Al respecto, se podría afirmar que la legalidad de volver a grabar todas las composiciones en el caso de Taylor Swift u otros artistas puede depender de varios factores, incluyendo los términos específicos del contrato original, las leyes de derechos de autor aplicables y cualquier acuerdo posterior entre las partes involucradas.

En el caso de Taylor Swift, ella optó por regrabar sus álbumes debido a una situación contractual que le impedía poseer los derechos sobre sus grabaciones maestras originales. Este tipo de acción puede estar dentro de los límites legales si el contrato original lo permite y si se respetan los derechos de autor de las canciones en cuestión. Sin embargo, regrabar canciones puede presentar desafíos legales, especialmente si hay disputas sobre la propiedad de los derechos de autor o si las nuevas grabaciones infringen los derechos de propiedad intelectual de otros.

En conclusión, el caso de Taylor Swift y su enfrentamiento con Big Machine Records y Scooter Braun ha generado una serie de reflexiones importantes sobre los derechos de los artistas en la industria musical. La situación destaca la necesidad de una mayor transparencia en los contratos entre artistas y discográficas, así como una comprensión más profunda de los derechos de propiedad intelectual.

La capacidad de una discográfica para ser titular de derechos sobre la música grabada y su capacidad para restringir las interpretaciones en vivo de los artistas depende en gran medida de los términos específicos del contrato. Sin embargo, la legalidad de regrabar canciones puede ser un terreno complicado y puede generar disputas legales, especialmente si hay discrepancias sobre los derechos de autor y las restricciones contractuales.

En última instancia, el caso de Taylor Swift ilustra la importancia de que los artistas comprendan plenamente los términos de sus contratos y estén preparados para tomar medidas legales para proteger sus derechos y su creatividad. Su decisión de regrabar sus álbumes muestra una valiente iniciativa para reclamar el control sobre su música y establecer un nuevo estándar en la industria musical.

REFERENCIAS

Bonilla Bran, J. D. (noviembre 2019). La batalla legal de Taylor Swift por los derechos de sus canciones. EL TIEMPO. Recuperado de:  https://www.eltiempo.com/cultura/musica-y-libros/taylor-swift-derechos-de-sus-canciones-ponen-en-duda-su-presentacion-en-los-ama-434666

Bau, A. (agosto 2023). ¿Qué es Taylor’s Version y por qué Taylor Swift está relanzando sus discos?. ELLE. Recuperado de: https://elle.mx/celebridades/2023/08/10/que-es-taylors-version-y-por-que-taylor-swift-esta-relanzando-sus-discos#google_vignette

BBC News Mundo (agosto 2023). Por qué Taylor Swift está regrabando sus primeros 6 álbumes. BBC News Mundo. Recuperado de: https://www.bbc.com/mundo/articles/c4nlml234m6o

Castro García, J. D. La propiedad industrial. Universidad Externado de Colombia.

Guerrero Gaitán, M. La propiedad industrial: Teoría y práctica. Universidad Externado de Colombia. 

Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. Concepto derechos conexos. Recuperado de: https://minciencias.gov.co/glosario/derechos-conexos#:~:text=Son%20aquellos%20derechos%20que%20conceden,de%20sus%20interpretaciones%20o%20ejecuciones12.


*Estudiante de quinto año de Derecho en la Universidad Externado de Colombia y Monitora del Departamento de Derecho Comercial

[1] Swift, T. [@taylorswift13], (2019, noviembre). Don’t know what else to do. [Tweet] Twitter. https://twitter.com/taylorswift13/status/1195123215657508867/photo/1

[2] Swift, T. [@taylorswift13], (2020, noviembre). Been getting a lot of questions about the recent sale of my old masters. I hope this clears things up. [Tweet] Twitter. https://twitter.com/taylorswift13/status/1328471874318311425/photo/1

[3] Ibid.

[4] Bajo los cuales los productores tienen unos derechos sobre los fonogramas y los organismos de radiodifusión sobre sus emisiones de radiodifusión sobre los artistas, así como lo ha mencionado el Ministerio de las Ciencia, Tecnología e Innovación.